Hace muchos meses que en desmárcate ¡YA! estamos avisando que competir con las grandes agencias de medios del Social Media es un poco ser David sin honda y enfrentarse a un Goliat de 70 metros con armadura de titanio. Hemos recomendado volver al negocio de lo «tocable» y a poder ser reducir el alcance real al entorno físico que puedas controlar.

En la actualidad y sobre todo este mes de agosto podemos observar en las Redes Sociales que los grandes medios están contratando ingentes cantidades de espacios (aunque sea a precios de saldo por la falta de ventas de los principales operadores) Vemos que Twitter está estancada, que Facebook pierde millones entre multas y la pérdida de alcance y de las otras redes ni se oye hablar.

Por otro lado si te miras las publicaciones en las principales redes sociales verás que una gran parte de los contenidos que te llegan o son patrocinados o directamente son anuncios de venta de productos. Los grupos de venta de productos de segunda mano en Facebook se llenan de artículos que no se mueven y al final a parte de algún «influencer» mostrando su ultima comilona poco más vas a ver… A lo mejor se empieza a parecer tanto a la televisión abierta que nos aburrimos de todo.

Hace unos meses decíamos que empresas como Coca Cola apoya sus acciones Social Media con eventos en el punto de venta y viceversa, realmente tuvieron éxito en su momento pero ahora ya ni eso. Personalmente recibo antes una promoción en el punto de venta que en Internet.

Las grandes empresas comercializadoras de productos Low Cost poco a poco se van apoderando del SEO pagado o SEM por lo que poco a poco al pequeño comercio (o no tan pequeño) le queda poco margen de maniobra. De que un amigo te lleve las redes sociales a que no sirva de nada si no es un profesional ya es obvio.

Entonces es probable que las empresas deberían dar un paso atrás, si bien es cierto que las ventas por Internet (en general) crecen sin parar en las estadísticas macro-económicas y que por tanto deben estar, pero haciéndolo bien. Deben poner sus puntos de venta y la especialización de sus empleados al máximo, asegurando que la experiencia del usuario o cliente sea excelente y que en definitiva nos compren aunque sea por Internet.

No dejemos que los catálogos sean aburridos y anticuados, si podemos dar soporte son realidad aumentada mejor y ojo que realidad aumentada no consiste en disponer cohetes interestelares… simplemente de aportar información extra publicada en Internet y que realmente aporte valor al cliente final.

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