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Cuantas palabras y palabrotas usamos en nuestro día a día, tantas y tan complejas que al final las definiciones quedan diluidas en mil palabras de mil voceros o vendedores de quincalla. Palabras de malos vendedores que son capaces de tergiversar conceptos con tal de llevarlos a su terreno de juego.

Hoy me voy a centrar en dos conceptos que inicialmente eran totalmente negativos y que en la actualidad se han tornado positivos, siempre y cuando no buceemos mucho en los manuales de definiciones… justo esos que escribieron los «Gurú» de los años sesenta hasta los ochenta, justo cuando la Internet como lo conocemos ahora no eran más que unas ideas y unas pocas líneas de código entre universidades o entidades militares norteamericanas.

No voy a referir fechas y nombres simplemente por que no las recuerdo exactamente y el buscar en mis libros me resulta aburrido, ni siquiera voy a usar la Wikipedia para documentarme… eso lo sabéis hacer solos.

Empecemos por los más antiguos, Los que realizaban acciones de Ingeniería Social eran aquellos personajes que eran capaces de hacer cualquier cosa con tal de dirigir tráfico a sus páginas web, principalmente creaban virus con los que captaban el interés de los navegantes hacia antivirus u optimizadores de sistemas operativos… Incluso podemos añadir a los que conseguían que te registraras en páginas de contenido pornográfico y te controlaban para que no te marcharas a espacios de la competencia.

Gracias al poder de divulgación de las Redes Sociales estos especialistas han ido concentrándose en el phishing y en la actualidad obtienen mayores beneficios con éso y dejando un poco en paz a las grandes masas, pero no olvidemos que algunos expertos en marketing sin muchos escrúpulos (sobre todo los que han venido de la programación y han evolucionado) tergiversan el significado original y se dedican a «vender» campañas eficientes orientadas a la conversión forzada aplicando algunas de las acciones de seguimiento, solo que ahora va disfrazado con un traje de ejecutivo.

Mucho más inofensivos eran los Growth Hackers, personajes que eran capaces de crear engagement brutal gracias a estrategias de comunicación diferentes y saliéndose de lo «Normal». Mediante mediciones de neuromarketing consiguen comprender las reacciones emocionales de las personas y por tanto pueden seguir diseñando campañas rompedoras y diferenciadoras. Estos especialistas, son realmente pocos para los que consiguen entrar en esa élite.

Y ahora hasta los técnicos en SEO nos hablan de crear reacciones emocionales en las personas, se ha comprobado que las tácticas de posicionamiento, si llegan a «tocar» a las personas son más eficientes. Incluso existen debates sobre el tema. Un tema que se está tratando desde el principio de los tiempos del marketing empresarial.

Hablo de marketing empresarial, por que las personas somos emocionales y gracias a ello conseguimos estar mucho más atentos a unos temas por encima de los otros. Los que procuramos crear engagement lo sabemos y lo usamos. ¿Manipulación? pues es muy probable, solo que es bastante complicado el manipular las emociones, al menos hacerlo sin que nos explote en la cara.

Jugar con las emociones de las personas es realmente feo, pero al fin y al cabo cualquier comunicación manipula (en positivo o negativo) lo único que nos diferencia a los «buenos» de los «malos» es que unos lo pensamos sin llegar a invadir y los otros lo único que quieren es dominar.

No será la primera vez que vemos en las redes sociales fotos de perritos o gatitos maltratados y el mensaje de una entidad «animalista» que nos recuerda lo malos que somos en la sociedad actual. Tampoco será la primera vez que veamos anuncios o comunicados de las ONG de ayuda de las personas en sociedades económicamente sub-desarrolladas que usan imágenes de niños desnutridos para conseguir financiación privada. Sin duda el objetivo es bueno, pero han conseguido que ya no confiemos en estas comunicaciones y nos limitemos a ignorarlas.

Lo que no estamos acostumbrados a ver es como entidades (de protección social) realizan comunicaciones sobre las acciones que llevan a cabo (no digo que no se haga, si no que no estamos acostumbrados a verlas). Pero eso pasa por que el hecho que se haya construido un pozo en una aldea africana no llama tanto la atención como un niño desnutrido. Recuerdo un artículo del País que mostraba que en Mali se crean pozos de agua potable combinando las nuevas tecnologías con los recursos locales y consiguiendo abaratar esas construcciones de manera muy considerable.

Pero eso es poco impactante, es poco relevante para una sociedad que se mueve a la velocidad de la luz.

Hasta Facebook se propuso hacer obra social haciendo llegar Internet a partes del mundo incomunicadas con el proyecto Internet.org Al fin y al cabo, ellos buscaban un nicho de mercado al tiempo que estaban proporcionando un servicio de comunicación. Francamente si me das a escoger prefiero que la gente pueda comunicarse a pesar de estar segmentados por Facebook.

Es por lo que si estas construyendo tu branding y hoja de estilo de tu empresa o producto no puedes dejar a un lado las acciones que pueden producir sensaciones, y sobre todo procurar respetar a los usuarios no usar ingeniería que pueda dominar y obligarles, debes proporcionar razones para que la gente te siga y razones por las que no te abandone.

¿Estás preparado para seguir siendo líder de tu mercado?

Enlaces de referencia:

Dicen que… Habladurías y sus consecuencias
Growth Hacking vs Social Media Manager. El marketing.