Ayer me preguntaba Adriana González de Barham en una entrada en su blog (aunque en realidad las respuestas las ofreció ella misma) por qué las empresas deben disponer de un blog o incluso por que según que entidades deben disponer de la web corporativa en 1.0 y alimentar sus comunidades con un blog.
Personalmente pienso que la web clásica, estática y que no permite al público interactuar con la marca está desapareciendo poco a poco.
Los consumidores por muy fidelizados que se encuentren con la marca quieren que las novedades les lleguen en primera persona, y si puede ser con ofertas hechas a su medida. Ofreciendo todo el valor añadido posible, junto con una experiencia ya no solo de compra, si no de consumo que le haga sentir muy especial.
Vale.. hasta aqui es de primero de marketing (aunque algunos no hayan pasado de la selectividad) pero ¿de qué estoy hablando?…
Es relativamente sencillo, las grandes corporaciones (o las que les gustaría serlo) confían en que un diseñador web les haga una web molona y correcta con la que enseñar sus «valores» y asó poder decir que tienen presencia en Internet.
El caso es que después de unos dás en los que los clientes y potenciales clientes les gusta conocer las novedades, ofertas fijas o estacionales e incluso poder dar su opinión sobre su propia experiencia. Sin olvidar al presunto consumidor que pretende conocer todos recovecos del producto para saber si va a cumplir con las expectativas.
Hace ya unos meses que la misma Coca Cola dejó abandonada al cierre su web corporativa para pasar a dar fuerza a los pequeños (o no tan pequeños) proyectos de divulgación, donde lo importante son las acciones puntuales sobre campañas concretas y sobre todo donde sus clientes tienen y dicen mucho a diario.
La información es volátil, es espontánea y sobre todo rápida, es más importante la información en si que su propia «forma» debemos estar preparados para hacer de fluya y arriesgarnos a que la comunidad nos enriquezca con sus propias experiencias. Por eso una web clásica, con la que mandamos los contenidos en bruto al programador, éste lo maqueta, sube las pruebas y el consejo de administración da su beneplácito y entonces se publica no es la solución. Nuestra comunidad está ávida de conocimiento, de noticias, de oportunidades.
Debemos usar un formato ágil y rápido. Con el que mostrar las novedades en el momento en el que sean relevantes y por encima de todo que se comparta en las principales redes sociales y que atraiga visitantes y opiniones desde cualquier parte del ciberespacio.
No es fácil, no voy a engañar a nadie, pero es plausible. Las comunidades siguen más de cerca a las empresas que tienen algo que decir, y aunque también es cierto que pueden consumirnos por «comodidad» lo harán hasta que haya un competidor que les llame la atención, y si perdemos a un seguidor lo fácil es que no vuelva si no somos capaces de llamar su atención cada día.
Probablemente con estos argumentos me quieras preguntar qué plataforma usar, cual es la más eficiente o qué es lo que yo haría… Para esto vas a tener que esperar unos días o símplemente mirar en mirar en mis antiguas publicaciones… Para el próximo martes cual es la plataforma que recomiendo y por qué!
0 comentarios