El cliente necesita sentirse especial, único, apreciado y no engañado
Recuerdo la sensación que me produjo ver la película Ghost. Justo aquella escena
«hoy tan manida» pero tan especial a la vez. La banda sonora de fondo:
«T O T A L» melodía desencadenada de los Righteous Brothers , ya sabéis de que escena hablo ¿ a que sí? ahora me limpio las manos de barro y sigo tecleando.
La película tuvo de todo: risas, lágrimas, intriga, amor y la verdad pensándolo bien es una putada que se muera el prota de esta historia de amor nada más empezar la peli. Pero aún así, solo por sentir esas sensaciones, esas emociones pagamos y disfrutamos el alto precio de soltar unas lágrimas de tristeza cuando lo matan y vemos como se rompen los sueños de esta pareja en pedazos, y no conformes, la vemos una y otra vez para volver a sentir esa sensación y llorar a moco tendido a cambio de esos instantes de placer emocional.
Sé que no os hecho un «spoiler» pues todos la habréis visto o mínimo sabéis de que va.
El cliente necesita sentirse especial, único, apreciado, seducido sí pero no engañado, para que tenga la necesidad de volver al lugar donde sus sueños se hacen realidad o se acercan a la misma, aunque sea a golpe de cartera y de forma efímera. En eso nadie les está engañando y lo saben.
Para mi forma de ver, entender y sobretodo de sentir, ese es el objetivo final del marketing y la publicidad; que todos cumplamos nuestros sueños y saciemos nuestras necesidades.
No olvidemos que muchas personas sacian su sentimiento de vacío comprando de forma compulsiva y eso transformado en ventas puede ser un tirón pero ¡CUIDADO!, no es ético aprovechar ese tirón con mala praxis, lo mejor de todo es que podemos hacer una simbiosis donde todos salgamos ganando.
Tanto el marketing como la publicidad van adaptándose a las necesidades de los consumidores/clientes. Hay que estar a la escucha «24/7» de las necesidades o reclamos de los mismos, con la única intención de servir un producto que sea «una bomba de satisfacción».
No es tarea fácil: A veces es casi un imposible pues todo se mueve a la velocidad de la luz y los gustos y las tendencias cambian en menos de lo que tarde en acabar de escribir este post.
Bueno + Bonito + Barato = COMPLICADO
En la actualidad, los productos no solo son productos, sino que además significan satisfacción, emoción, compromiso y se convierten en potenciadores de bienestar.
Por lo tanto bajo mi punto de vista hay que llegar a las personas mediante las emociones y los sentimientos y solo se me ocurre una forma para conseguirlo y es hacerlo desde el corazón.
De esta forma puede que no nos hagamos muy ricos a corto y medio plazo, pero el crear una marca que sea capaz de gestionar correctamente todos estos aspectos emocionales indica que esa marca será capaz de crear una conexión profunda y duradera con sus clientes y eso para mi si que es una clave de éxito.
Me gustaría saber cual es tu opinión sobre este tema. Espero tu comentario.
Gracias por leernos.
Buena entrada Pury…
Por supuesto las sensaciones y sentimientos deben formar parte de la estrategia de cualquier empresa. Hace mucho tiempo que los consumidores compran lo que necesitan y buscan la máxima complacencia al abrir sus carteras.
Gracias Miguel 😀
Gracias por desnudar el marketing Pury, siempre lo consigues. No solo vale con atraer o encandilar a las personas, si se hace así cuando pase el efecto quedará un vacío muy grande que debíamos haber llenado con valor y confianza, ahora será tarde.
Mil gracias Jorge, así mismo lo entiendo 😉
¡Excelente entrada, Pury!
Emocionar, como haces con este artículo, es la mejor forma de transmitir el significado de la filosofía Marketing: Entender que la adecuada satisfacción de necesidades pasa por establecer relaciones en cuya base estén la confianza de la que habla Jorge y el respeto (también a las carteras) que menciona Miguel.
Gracias.
Patricia me emociona que te emocione «nada menos a ti» que eres una reina del marketing. Ese era mi objetivo sentimental y cercano 🙂